Fortalecido en sus posturas ultra tras la asunción de Donald Trump, el presidente Javier Milei redobló la apuesta e. Foro Económico Mundial de Davos, donde el año pasado había sorprendido con sus diatribas contra todo y contra todos, con un nuevo discurso en línea con su batalla cultural. "Ya no me siento tan solo", dijo, para luego ratificar que se siente un faro a nivel global: “El mundo ha abrazado a la Argentina, que se ha convertido en ejemplo mundial”.

El mandatario consideró que el progresismo internacional y la cultura woke son “la epidemia que hay que curar y el cáncer que hay que extirpar”. Dentro de los enemigos a combatir, mencionó la ideología de género, el feminismo, el ecologismo radical y la bandera de cambio climático.

Milei recordó su participación del año pasado y se vanaglorió de la nueva situación. “Les dije que era el comienzo de una nueva Argentina que estuvo infectada de socialismos durante mucho tiempo”. Para luego agregar: “Ya no me siento tan solo; lentamente se ha ido formando una alianza internacional de todas las naciones que queremos ser libres y abrazar la ideas de la libertad”, planteó.

Como si fuera un integrante de la Liga de la Justicia, una serie de dibujitos que unía a Batman, Superman, La Mujer Maravilla y otros supehéroes, mencionó: “A lo largo de este año he podido encontrar compañeros en esta pelea en todos los rincones del planeta, desde el maravilloso Elon Musk, hasta la feroz dama italiana, mi querida amiga Giorgia Meloni; desde (Nayib) Bukele en El Salvador a Viktor Orbán en Hungría; desde Benjamín Netanyahu en Israel, a Donald Trump en Estados Unidos”.

En particular sobre su gestión de gobierno, sostuvo que "Argentina se convirtió en ejemplo mundial de responsabilidad fiscal, de compromiso con nuestras obligaciones, de cómo terminar con el problema de la inflación y también de una nueva forma de hacer política, que consiste en decirle la verdad a la gente en la cara y confiar en que la gente entenderá”.

El año pasado, Milei había planteado que Occidente estaba  en peligro y prácticamente acusó a todos los presentes de abrazar el socialismo, la ideología que a su criterio había contaminado la civilización.

Esta vez retomó sus conceptos y puso en el centro de la escena la cultura woke. “Hasta que no saquemos esta ideología de nuestra cultura la sociedad de occidente, e incluso la especie humana, no logrará retornar en dirección al progreso, por eso hoy quiero dedicar unos minutos a destruir esas cadenas”, dijo.

Además, Milei varias veces se refirió al magnate Elon Musk y lo puso a la par de los “pioneros” del capitalista, al tiempo que volvió a defenderlo luego de un gesto que tuvo en la asunción de Donald Trump y que pareció un saludo nazi. “Mi querido amigo que injustamente fue vilipendiado por el wokismo en las últimas horas por un inocente gesto que lo único que significa es su entusiasmo y gratitud por la gente”.

El presidente dijo que “hay pocas personas que niegan que soplan vientos de cambio en occidente” y mencionó “a quienes se resisten al cambio, a quienes lo aceptan al fin, a los nuevos conversos cuando lo ven como inevitable y los que luchamos toda la vida”. “El tiempo de cambio está tocando la puerta. Son tiempos en que las fórmulas que estuvieron presente siempre se agotan, en que las maneras consideradas de hacerlas únicas dejan de tener sentido, son momentos donde las reglas se reescriben”, agregó.