La resistencia de algunas personas a vacunarse y a vacunar a sus hijos fue incluida entre los 10 mayores desafíos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de cara a los próximos cinco años.
Este movimiento, impulsado por personas sin ningún tipo de aval científico y vía redes sociales, ha logrado un incremento del 30% en los casos de sarampión a nivel mundial, así como también la reaparición de enfermedades que estaban casi erradicadas.
Otro frente de lucha que se fijó la OMS es contra enfermedades no contagiosas como la diabetes, el cáncer o las dolencias cardíacas, responsables del 70% de las muertes en el mundo, y cuyo ascenso tiene su origen en el consumo de tabaco y alcohol, la inactividad física, dietas poco sanas o la contaminación.
En este sentido, el organismo se ha comprometido por ello a trabajar con distintos gobiernos para alcanzar la meta global de reducir la inactividad física un 15 por ciento hacia 2030, según EFE.
También incluyó en el listado a la polución atmosférica, a la que considera como “el mayor riesgo medioambiental para la salud”, al matar cada año de forma prematuramente a siete millones de personas por enfermedades pulmonares y cardíacas o cáncer.
La permanente amenaza de una pandemia de gripe, el aumento de la resistencia microbiana a antivirales, antibióticos y otros fármacos, el actual brote de ébola en la República Democrática del Congo y el aumento del dengue son otros temas incluidos en la agenda de la OMS.
