Una yegua embarazada de seis meses cayó por el hueco de una boca de tormenta sin tapa, pasó la noche del domingo en un pozo y finalmente fue rescatada este lunes a la mañana por los Bomberos en Villa Gobernador Gálvez, luego de unas cuatro horas de trabajo con maquinaria pesada para acceder a la zona, romper parte de la estrucutra y sacarla sana y salva.
El domingo a la noche, el animal pisó la boca de tormenta que no tenía tapa porque se la robaron, según explicaron desde la empresa Aguas Santafesinas, y quedó atrapado sin poder salir por sus propios medios en un terreno irregular y lleno de maleza al pie del puente ferroviario que cruza el arroyo Saladillo, cercano a las calles Caseros y avenida San Diego de la vecina ciudad.
El propietario la asistió y como vio que estaba bien de salud y su vida no corría peligro esperó hasta la mañana del lunes para reportar el accidente al municipio y a los Bomberos, que tuvieron que trabajar con una retroexcavadora y otra maquinaria para lograr el rescate.
Patricio Hidalgo, jefe de Bomberos Voluntarios, explicó que “la boca por donde ingresó era de 60 centímetros de diámetro” y que al llegar al lugar evaluaron el estado de la estructura y de la yegua, que cayó parada, para resolver cómo trabajar en busca de sacarla del hueco, que en su interior tiene unos dos metros por tres.
“Solicitamos la presencia de un veterinario y dijo que su estado de salud era bueno. El propietario vio que no había ningún tipo de riesgo y esperó hasta hoy. En ese sector hay tres bocas de inspección, a las tres les falta la tapa porque fueron vandalizadas. La gente de Aguas tiene que reponerlas cada dos o tres meses”, agregó.
La caída generó más preocupación porque el equino está preñado de seis meses, la mitad del período de gestación, pero más allá del estrés causado por el golpe y la desesperación de no poder salir no sufrió otras lesiones.
“No fue necesario poner calmantes ni realizar maniobras sobre la salud del animal”, apuntó Hidalgo, quien estuvo a cargo de coordinar el rescate en medio de una zona cubierta de maleza y vegetación, y que tuvieron que despejar para adecuar el terreno y posibilitar el ingreso de la maquinaria.
