Los familiares de los primeros tres detenidos por el fuego en las islas aseguraron este martes que ellos no son los responsables de los incendios masivos sino que realizaron un contrafuegos para cuidar las colmenas y una casilla porque son apicultores en el humedal frente a Villa Constitución, aunque no saben quién es el propietario de esas tierras.

“Los detuvieron el domingo al mediodía y les dijeron que los contrafuegos solo los hacían los profesionales (del combate a las llamas) pero ¿los profesionales dónde estaban en ese momento?”, reprochó Vanesa, la mujer y madre del hombre y los dos hijos detenidos, respectivamente. 

Desde Victoria, donde sus familiares permanecían bajo arresto y declararon ante el juez federal Federico Martín, Vanesa dijo a De 12 a 14 (El Tres) que esperaba sean liberados esta misma jornada. “Mi expectativa es llevarlos a mi casa porque ellos son inocentes”, señaló y pidió que “encuentren a los responsables” del desastre ambiental en el Delta del Paraná.

Sin embargo, a las 13.40 el fiscal federal Claudio Kishimoto confirmó que seguirán detenidos mientras confirman la versión que dieron (el juez puede disponer hasta diez días hábiles de arresto). 

La mujer sostuvo que su marido es apicultor, que salió con dos de sus hijos el sábado a la tarde para cuidar las colmenas de los incendios que había cerca del lugar. “Hizo un contrafuego porque se les venía el fuego encima”, recalcó.

Juan Cruz, otro de los hijos de la pareja, contó que desde la detención del domingo su padre y sus hermanos quedaron incomunicados. “Estamos esperando que terminen las declaraciones para saber que va a pasar”, afirmó pasadas las 12 de este viernes desde la localidad entrerriana.

El joven defendió el accionar de su familia para cuidar su actividad (apicultura) de un foco ígneo que estaba en la zona y afirmó: “Un islerño sabe cómo hacer un contrafuego”. 

Especialistas explicaron a Rosario3 que los contrafuegos u otras técnicas similares (contrafuegos) para combatir las llamas siempre deben ser supervisados y autorizados por la autoridad competente.

Un ejemplo del descontrol en el lejano este

 

Sobre la titularidad de las tierras en donde trabajan y tienen sus colmenas, los familiares de los acusados dijeron no saber a quién corresponde. “Hace años que vivimos ahí, fuimos y agarramos (el terreno) y nunca supimos quiénes eran los dueños”, dijo.

“Hasta el día de hoy nadie se ha acercado”, contó y señaló que si bien hay producción ganadera en esa zona “tampoco sabemos de quiénes son los animales”.

En principio podrían tratarse de tierras fiscales. El testimonio grafica lo que las propias autoridades de Entre Ríos reconocen. “No sabemos quiénes viven en nuestras tierras, no tenemos el control adecuado”, dijo la secretaria de Ambiente, Daniela García la semana pasada.