La escasez global de semiconductores y otros componentes está afectando a las compañías tecnológicas, que se ven forzadas a reducir sus volúmenes de producción en medio de una situación originada a partir de los problemas de transporte mundial por la pandemia.
Una de esas empresas es Apple, que frente a esta situación decidió priorizar la fabricación de los iPhone 13 por sobre la de sus otros productos, ya que los teléfonos son los que le dejan mayor rentabilidad.
Según informó el portal Nikkei Asia, Apple "ha recortado drásticamente" la producción del iPad hasta un 50 % para dedicar los componentes a los iPhone 13.
Este recorte no solo ha llegado a las tablets de Apple, sino que también han empezado a reducir de forma importante la fabricación de los iPhone más antiguos que siguen en el mercado.
Debido a esto, la empresa no descartó que se sigan registrando demoras en la entrega de los dispositivos, por lo que sugieren que los compradores se adelanten a la época de fiestas para comprar sus equipos, publicó 9to5Mac.
La escasez de microprocesadores empujó a países como China, Estados Unidos y a varios de Europa a trabajar para ser más autosuficientes en la producción de estos componentes. En cuanto a la normalización de la situación, analistas y expertos de la industria apuntan que podría empezar a verse recién a mediados del 2022.
