La vejez, es una etapa del curso de la vida impregnada de  prejuicios relacionados con la decadencia. Inclusive, se la asocia con la enfermedad, en contraposición a lo sano y saludable que otorgaría la juventud. Lo sabemos: ser viejo no es estar enfermo.

Vamos a posicionarnos desde una mirada de mayor complejidad, no tan lineal, para comprender mejor este tema, pensando en procesos de envejecimiento atravesados en el tiempo, tato por factores biológicos como neuro psicológicos, y sociales. La actividad musical puede accionar y participar activa y receptivamente en estos procesos.

La música, como parte de la cultura y como portador de los elementos que la constituyen: ritmo melodía, armonía, dinámicas sonoras, interactúa con el ser humano.

La musicoterapia es una disciplina del orden de la salud que utiliza, como recurso, la música y las técnicas psicomusicales, para inducir a una persona a trabajar dentro de su historia de vida, tomando en cuenta las áreas: neuro psicológicas, biológicas y socio culturales

Procedimiento

Técnicas activas y receptivas para prevención y promoción de salud

Áreas cognitivas: la actividad musical es un estímulo multimodal que transmite al cerebro información auditiva, motora y visual, e induce emociones. Dispone de redes específicas para su procesamiento, no exclusivas, sino compartidas con numerosas funciones que implican a todo el encéfalo

Técnicas relacionadas con la canción: son las más adecuadas para trabajar la memoria en adultos mayores. Sabemos que la memoria está íntimamente ligada a la emoción. La audición de temas musicales, así también como el canto funcionan como inductores de recuerdos. Significa que, mediante la evocación de sucesos pasados, apelando a la memoria episódica, se actualizan recuerdos de vivencias significativas que se transforman en disparadores para ampliar la verbalización apelando a la memoria semántica.

Identidad narrativa: Articulando los recuerdos emergentes, se promueve el fortalecimiento de la identidad narrativa de un sí mismo que responda a su historia de vida En esta etapa de la visa, la identidad   se encuentra condicionada por el prejuicio de sentirse viejos en una sociedad que los desvaloriza.

Empoderamiento y autoestima: A partir de un hacer musical vocal y/o instrumental que lo sitúa en un lugar de productor de experiencias estéticas y artísticas, se proponen encuentros donde los familiares asisten a presentaciones musicales corales e instrumentales, con los que se   genera otra mirada en los más jóvenes, con lo cual se promueve el empoderamiento.

Técnicas corporales: La musicalidad y el ritmo en la danza o el baile, son experiencias sumamente placenteras que colaboran con la conciencia de su propio cuerpo; el ritmo y la sincronía de movimientos, la búsqueda de emociones dentro del tema musical, los que, luego, llevan a la expresión verbal.

Propuesta para adquirir nuevos aprendizajes, los cuales se traducirán en conexiones neuronales para favorecer la atención, la memoria, la psicomotricidad, lo que permite se retrase la aparición de déficits cognitivos; o, si ya estuvieran, contribuir a que avancen con mayor lentitud.

En instituciones Geriátricas residen ancianos que atraviesan un envejecimiento patológico. En este proceso, se producen cambios como consecuencia de enfermedades; por ejemplo: demencias, enfermedad de Alzheimer, Parkinson, etc.

Las técnicas musicoterapéuticas ofrecen espacios de calma y relajación para promover el descenso de la excitación y de la ansiedad de estas personas con compromiso psiquiátrico y neurológico. E.  tratamiento promueve y motiva el deseo de interactuar y comunicarse, así como intervenir, recurriendo a sus capacidades cognitivas afectivas y relacionales ya mencionadas. Esto vale, también, para el trabajo con la memoria, con el intento de evocación y la, estimulación; ya que, por ejemplo, la letra de una canción activará a las áreas del lenguaje del cerebro (área de Wernicke y Broca), la corteza visual (al imaginar lo que dice la canción), la corteza motora y el sistema límbico. Esta actividad puede mejorar el habla y hasta el vocabulario de una persona con alzheimer.

La música, también, ha demostrado ser útil en el tratamiento de personas con Parkinson, al estimular la corteza motora. Además, trabajos rítmicos y danza, como el tango, son indicados para estos casos.

Clara Galliano, Lic. en Musicoterapia por la UBA. Profesora de Música por el Conservatorio Nacional. Docente, hasta el año 2017, de la carrera de Musicoterapia en la Facultad de Psicología de la UBA. Docente Post Título de Especialización Superior de enseñanza de la Música en la cátedra: Trastornos emocionales leves moderados y severos del Conservatorio Astor Piazzolla.