Expertos del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición, pertenecientes a la Unidad de Nutrición Humana de la Universitat Rovira i Virgili (URV), han demostrado que consumir 60 gramos de frutos secos al día se asocia con una mejora de la función sexual, según publica elespectador.

Para ello han llevado a cabo el primer estudio de intervención nutricional en hombres sanos y en edad reproductiva con el objetivo de descubrir si existe un efecto del consumo regular de frutos secos en la función sexual. Este análisis se ha diseñado dentro del marco del proyecto FERTINUTS, creado para evaluar los efectos de estos alimentos sobre la calidad del semen.

Los resultados obtenidos subrayan que la adscripción a una dieta occidental –no saludable– complementada con nueces, avellanas y almendras puede ayudar a mejorar el deseo sexual y función orgásmica. Los investigadores también apuntan que se requieren estudios con más participantes para confirmar estos resultados y aclarar los posibles mecanismos implicados en estos beneficios.

Fuente: elespectador