Este miércoles por la mañana, el gobernador Omar Perotti tomó juramento al nuevo ministro de Seguridad, Rubén Rimoldi, en medio de críticas de la oposición por su pasado policial. Hasta 2008 y por 30 años, se desempeñó en la fuerza política y desde distintos partidos políticos lo tomaron como una suerte de “retroceso democrático”, al privilegiar desde su óptica una conducción “política civil” de la Policía. Perotti defendió la designación y también le quitó peso a las pintadas que aparecieron este martes en distintos lugares de Rosario –entre ellos edificios públicos como la propia sede de gobierno–, que para algunos pareció ser el detonante de las salidas de Lagna y la jefa policial provincial Emilce Chimenti.

Consultado durante la conferencia de prensa posterior al acto de juramento sobre las críticas de la oposición, el gobernador destacó la idoneidad de Rimoldi justamente por su pasado policial, foco de reparos para algunos.

Dijo que Rimoldi tiene “conocimiento, experiencia y formación” y que, como cualquier otra persona que prestó servicios en la Policía, concluida su tarea “se reincorporó plenamente a la vida civil” y en su caso, con el agregado de un compromiso democrático: fue candidato a intendente de Casilda en 2008 por el Frente Progresista.

“La situación requiere de aportes, no me pongo a mirar si tiene pertenencia política de tal o de cual, amerita la grandeza de todos”, observó Perotti y recomendó: “Sería bueno que sin prejuzgar, los legisladores o quienes opinen, contribuyan, ayuden y generemos los mejores lineamientos para un trabajo común”.

Además, llamó la atención sobre la contradicción de “ver bien” a un médico en el ministerio de Salud, o a un productor en el ministerio de Producción y no a alguien que se ha desempeñado en la Policía y formado en seguiridad, en el ministerio de Seguridad.

Por otro lado, sobre las pintadas de este martes, Perotti descartó que hayan sido el detonante de los cambios en su gabinete y en tal sentido, señaló que “tenemos muchos edificios pintados hace tiempo en muchos lugares, cosa que no está bien y no corresponde”, pero que eso no precipitó modificaciones de gestión como las de este miércoles.

Sostuvo que la salida de Lagna y Chimenti es resultado del “análisis” y de un proceso que estaba agotado.