Tras ocho años de gestión, la intendenta Mónica Fein aseguró que le deja a la próxima gestión “una ciudad en marcha aunque con dificultades económicas” y calificó de “excelente” la transición con su sucesor Pablo Javkin.

En el programa De 12 a 14 (El Tres), Fein contó que recibe “gran afecto y respeto” de los rosarinos al margen de que “algunos coincidan y otros no tanto” con sus acciones.

“Dejamos una Municipalidad con el mismo número de empleados con lo que yo inicié. No las mismas personas porque hubo jubilaciones e ingresos pero sí la misma cantidad”, dijo.

La intendenta reconoció que Rosario vive una “situación económica compleja” pero ató esa condición a la crisis nacional. Contó, por ejemplo, que en el presupuesto local se estimaron subas de tasas de un 35 por ciento cuando la inflación anual supera el 50.

Sin embargo, ratificó que su gestión “va a pagar los sueldos este viernes” y también confirmó las partidas para hacer frente al aguinaldo.

En ese marco, Fein aseguró: “La transición fue excelente con Pablo, nos reunimos semanalmente y los equipos también”.

“Obvio que hay diferencias”, dijo y aclaró: “Se generan tensiones pero las hemos resuelto en una mesa de diálogo, no sin discusiones pero en respeto”. Habló de un contacto telefónico “casi cotidiano” con el intendente electo.

Por otro lado, anunció que se retira de la Municipalidad (donde había ingresado en 1982): “No tengo ningún cargo ni lo necesito”. Adelantó que seguirá en política, partidaria y “aportando en lugares pequeños”.

“Voy a seguir en la política, que no es una carrera, es una vocación que tengo frente a las injusticias”, dijo.