El gobierno provincial de Omar Perotti vuelve a la carga con las emergencias, pero esta vez confía encontrar el respaldo que no consiguió en diciembre pasado. Se espera que en las próximas horas, el Poder Ejecutivo envíe a la Legislatura los proyectos para declarar la emergencia económica y en seguridad, por separado. En su momento, la oposición había criticado a la nueva administración peronista de buscar superpoderes. Además de las declaraciones a nivel económico y en seguridad, a fin del año pasado, Perotti había pedido en un mismo tratamiento las emergencias sanitaria y social.

Confío en que el consenso ahora será diferente”, dijo el ministro de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos de Santa Fe, Esteban Borgonovo, este martes en contacto con el programa La primera de la tarde (Radio 2). Y señaló que el año pasado fracasaron las iniciativas en la Cámara de Diputados, en parte, por el “coletazo de una transición que no vino bien”.

“Llegamos atrasados con el diálogo”, reconoció y aseguró ahora: “Creo que estamos en otra situación”.

Pese a haber conseguido la media sanción en en el Senado contra todo pronóstico, los diputados rechazaron en su sesión del 30 de diciembre la ley de declaración de emergencias que ahora el Ejecutivo busca sacar, pero de forma disociada.

Para Borgonovo, que se abran las comisiones para debatir las distintas propuestas “es un progreso” y un “buen signo”. Pero además, es un primer gesto a una situación impostergable. Se refería a los pronunciamientos públicos en ciudades y pueblos con serios problemas de caja para sortear la crisis luego del cambio de mando a nivel nacional y provincial.

Consultado sobre la inseguridad y violencia en Rosario –que ya lleva 20 homicidios en 21 días–, el ministro destacó que la declaración de emergencia es una herramienta más, pero no la única para frenar la criminalidad y recordó que “desde el primer día, el gobierno manifestó que hay que trazar una línea absolutamente infranqueable con el delito”.