Rubén Diego José Rimoldi juró este miércoles como ministro de Seguridad de Santa Fe en un acto modesto presidido por el gobernador Omar Perotti en la ciudad de Santa Fe. Confirmó las políticas y rumbo ya en marcha desde la cartera que este martes dejó Jorge Lagna, pero prometió "más calle y rapidez" de parte de la Policía. En tal sentido, adelantó un "ordenamiento de mandos y cuadros". Y restó peso a los cuestionamientos por su pasado político dentro del Frente Progresista. 

En una breve conferencia de prensa tras su asunción, el ex comisario casildense adelantó a grandes rasgos las primeras medidas que procurará llevar a cabo: “Las políticas de seguridad que se venían llevando a cabo se continuarán de la misma manera. En la Policía  vamos a ordenar los mandos como corresponde y también vamos a reestructurar los cuadros para que en los lugares más álgidos, donde tenemos ese problema de la falta de seguridad, estemos presentes a partir del tiempo que sea necesario, con rapidez”.

Consultado por su candidatura a intendente de Casilda en 2008 por la lista del Frente Progresista, le restó importancia a los colores políticos. Dijo que fue una presentación que derivó de “decisión de vecinos” de esa ciudad.

“He trabajado en otros municipios que no son de ese partido político”, aclaró. Y sentenció sobre su flamante labor en seguridad: “Estoy trabajando en este cargo por mi profesionalidad”.