Dos personas fueron imputadas por ser partícipes necesarios del homicidio de Raúl Daniel Attardo y Andrés Bracamonte, hecho ocurrido 9 de noviembre de 2024 en las adyacencias del estadio de Rosario Central.
Los fiscales Georgina Pairola y Luis Schiappa Pietra le imputaron a A. R. y a A. Z. ser partícipe primario en grado de consumado del delito de homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas, agravado por el uso de arma de fuego.
La imputación también los señala en relación al robo de vehículo dejado en la vía pública en carácter de partícipe primario y en grado de consumado. El Juez de primera instancia Dr. Postma tuvo por formalizada la audiencia imputativa haciendo lugar al pedido de la Fiscalía de prisión preventiva por el plazo de ley.
El hecho se produjo tras un partido que el equipo de Arroyito jugó en su cancha ante San Lorenzo, cuando dos personas en forma pedestre se aproximaron a la camioneta Chevrolet S 10, donde se encontraban las víctimas y una de ellas disparó del lado del acompañante, donde estaba sentado Pillín Bracamonte. Las balas impactaron en el cuerpo de las dos personas, que murieron como consecuencia de los disparos.
Los atacantes, quienes aún no fueron identificados, escaparon del lugar por calle Avellaneda hacia el norte hasta llegar a la intersección con calle Almafuerte. Allí los estaba esperando una tercera persona en moto, tampoco identificada. En la huida, dejaron la motocicleta en Almafuerte al 1100.
Según le consta a los fiscales, momentos previos al hecho, una camioneta blanca trasladó a los autores materiales del hecho desde inmediaciones del domicilio A. Z. hasta el lugar del hecho. Cuarenta minutos después, cometieron el homicidio.
Una vez consumado el crimen, la camioneta que los había llevado a la escena del crimen regresó al domicilio de A. Z. Se sospecha que en la planificación y realización del homicidio participó otro vehículo, que ofició de acompañante de los movimientos.
Los imputados hicieron aportes necesarios para que el hecho se concretara de la forma en que se llevó a cabo, indican los investigadores. A. Z., fue quien puso a disposición su domicilio como punto de encuentro del grupo de personas que participaron en el hecho.
