El Ministerio de Salud provincial, a través del Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos y Tejidos (Cudaio), informó que en el mes julio se lograron dos marcas históricas: 12 donantes de órganos y 36 trasplantes posibilitados por esos donantes.

La mayor cantidad de trasplantes en un mes databa de marzo de 2014, cuando se realizaron 10 proceso de donación de órganos, lo que fue superado en julio pasado. Los 36 pacientes que recibieron su implante a partir de los órganos obtenidos en esas donaciones también constituyen un récord histórico de ablaciones posibilitadas por santafesinos.

El director de Cudaio, Martín Cuestas, señaló que “siete de los procesos fueron multiorgánicos, con lo que una vez más se confirma la calidad profesional y el compromiso humano de todo el personal que interviene, tanto de los médicos como de toda la cadena de responsabilidades que forman parte del proceso”.

En el Hospital de Emergencias "Clemente Álvarez" (Heca) de Rosario hubo cinco donaciones, en tanto que otras dos tuvieron lugar en el Hospital "Eva Perón" de Granadero Baigorria y una en cada uno de los siguientes efectores: Sanatorio Mapaci y Hospital de Niños Zona Norte, de Rosario; Hospital "José María Cullen" de Santa Fe; Hospital "Jaime Ferré" de Rafaela; y Sanatorio Esperanza de la ciudad homónima.

A partir de los órganos ablacionados se realizaron 21 trasplantes renales, ocho hepáticos, tres cardíacos, tres pulmonares y un renopáncreático. La mayoría de estos órganos se destinaron a pacientes santafesinos, en tanto que los restantes, a personas de distintos lugares del país, siguiendo criterios de Incucai a través de su herramienta unificada, el Sintra.

Un donante posibilitó 7 trasplantes

La donación multiorgánica acontecida en la ciudad de Rafaela posibilitó el trasplante de siete personas. Este operativo, que tuvo lugar en el Hospital "Jaime Ferré", involucró a cinco equipos de trasplante de distintos lugares del país, que se movilizaron por vía aérea hasta el aeródromo rafaelino.

De este proceso, “se destacan dos cosas: en primer lugar, es excepcional la cantidad de órganos que se pudieron ablacionar; y segundo, que cuatro de los siete receptores eran pacientes en emergencia nacional, lo que significa que transitaban un estadio de suma gravedad en sus patologías, con riesgo inminente para sus vidas. Por eso se puede afirmar que este donante salvó cuatro vidas y ayudó a mejorar la calidad de vida de otros tres pacientes”, expresó Cuestas.