El estadounidense James P. Allison y el japonés Tasuku Honjo ganaron el premio Nobel de Medicina 2018 por sus estudios de terapias contra el cáncer, según informó este lunes el Instituto Karolinska de Estocolmo. Ambos científicos recibirán el premio por las terapias desarrolladas que se caracterizan por la inhibición de la regulación negativa del sistema inmune.

Allison, nacido en Texas en 1948, estudió una proteína que funciona como un freno en el sistema inmunológico y su potencial para liberar células inmunitarias que ataquen tumores, con lo que desarrolló un nuevo enfoque para tratar a los enfermos, indicó en un comunicado.

Honjo, nacido en Kyoto en 1942, descubrió a su vez una proteína en las células inmunitarias y reveló que también funciona como un freno, pero con un mecanismo de acción diferente, lo que posibilitó el desarrollo de terapias de gran efectividad contra el cáncer.

El Nobel de Medicina abre la ronda de anuncios de estos prestigiosos premios, al que seguirán en los próximos días los correspondientes a Física, Química, de la Paz y finalmente Economía, que se dará a conocer el lunes próximo.

Cada uno de los galardones está dotado este año con 9 millones de coronas suecas (1,023 millones de dólares), a repartir en caso de que haya más de un premiado.

Los premios son entregados el 10 de diciembre, en coincidencia con el aniversario de la muerte de su fundador, Alfred Nobel, en una doble ceremonia en el Konserthus de Estocolmo y en el Ayuntamiento de Oslo, donde se otorga y entrega el de la Paz.

Esta edición de los Nobel es atípica, ya que no se entregará el correspondiente al de Literatura, aplazado hasta el año que viene por el escándalo que rodea a la Academia Sueca, la institución que lo otorga. La decisión se adoptó después de que en noviembre un periódico publicara la denuncia de 18 mujeres por abusos contra una persona luego identificada como Jean-Claude Arnault, artista francés vinculado a la academia a través de su club literario y esposo de una de sus miembros, Katarina Frostenson.

Arnault fue condenado justamente hoy a dos años de cárcel por un tribunal de Estocolmo.

Honjo

"Espero que este tratamiento siga salvando más vidas", afirmó el investigador, de 76 años, en una rueda de prensa que ofreció en la Universidad de Kioto (centro), donde continúa ejerciendo como profesor invitado. "Espero que este premio motive a otros investigadores a continuar en su camino", dijo el japonés.

"Durante este siglo -añadió Honjo- llegará el día en que el cáncer ya no será una amenaza, al igual que las enfermedades infecciosas".

Nacido el 27 de enero de 1942 en Kioto, Honjo descubrió en 1992 la proteína PD-1, un inhibidor de las células inmunitarias T que ayuda a controlar las respuestas inmunitarias del cuerpo.

El descubrimiento de esta proteína contribuyó al desarrollo de un fármaco inmunoterapéutico contra el cáncer más efectivo, el Opdivo, empleado en tratamientos contra el cáncer de pulmón y el melanoma, el tipo más grave de cáncer de piel.

El inmunólogo molecular nipón explicó durante su comparecencia que cuando hizo su hallazgo no se imaginó que una investigación "tan básica como ésta" fuera a aplicarse de forma tan amplia.

Honjo recordó el impacto que tuvo en él la muerte prematura de un compañero de universidad, al que dijo seguir teniendo presente, y que fue uno de los motivos que hizo querer contribuir en la lucha contra esta enfermedad.

Al ser preguntado por Allison, junto al que fue galardonado hoy, Honjo dijo que este premio le es "merecido".

"Lo que él y yo hacemos se complementa. (...) Creo que es la mejor combinación posible, desde mi punto de vista", dijo el nipón.

El químico japonés tuvo que interrumpir la rueda de prensa al recibir una llamada del primer ministro, Shinzo Abe, quien lo felicitó "por haber salvado muchas vidas" gracias su investigación, palabras ante las que Honjo se mostró agradecido.

Honjo ha recibido numerosos galardones, entre los que destacan el Premio Tang de Biotecnología Farmacéutica en 2014 (que ganó también junto a James P. Allison), la Orden de la Cultura de Japón en 2013, el Premio Robert Koch en 2012 y el Premio Imperial de la Academia de Japón en 1996.