No fue un discurso más el del presidente Mauricio Macri ante el encuentro anual de la Asociación Empresaria Argentina (AEA). Hoy, varios directivos de la entidad están involucrados en la causa de los cuadernos de las coimas y, en ese marco, el jefe del Estado les dijo a los 150 ejecutivos de las principales empresas del país presentes: “Si reciben un pedido indebido, acá tienen un presidente al que acudir”.

Así, Macri buscó mostrarse plantado ante la corrupción. “Yo no tengo pensado hipotecar mi gobierno ni el futuro de los argentinos por defender a nadie que actúe fuera de la ley”, sostuvo Macri.

También habló sobre los problemas económicos. “Hoy como sociedad empezamos a decir las cosas por su nombre, empezamos a poner los problemas de verdad sobre la mesa, a no negarlo, a no buscar soluciones mágicas, y sobre todo a no gastar sin control los recursos del Estado, que son los recursos de todos los argentinos”, afirmó.

Entre los integrantes de la AEA se encuentran Paolo Rocca, CEO del Grupo Techint y Aldo Roggio, del grupo Roggio, quien admitió haberle pagado coimas a Ricardo Jaime, ex secretario de Transporte.

En otro tramo de su discurso, que duró unos 12 minutos, Macri llamó a "terminar con los comportamientos mafiosos que ustedes (por los empresarios) tienen que denunciar".