La concejala María Eugenia Schmuck visitó este domingo los estudios de Radio 2 y adelantó que el jueves próximo será la audiencia imputativa a los cuatro taxistas que protagonizaron lo que se conoció como “la mafia de la Terminal de Ómnibus”. También explicó su postura en cuanto a Uber y la posibilidad de arribo a la ciudad. Mientras que no soslayó la pregunta sobre su futuro político de cara al 2019.
En el programa Todavía no es tarde, que conduce Daniel De Paola, la edila anticipó la imputación por amenazas contra los acusados de aprietes y violencia hacia mujeres, en especial, y hombres que intentaban simplemente trabajar con sus taxis en un espacio que es público.
Señaló que fue una gran investigación la que se llevó a cabo para poder erradicar este problema que desde hacía años ocurría pero nunca la Justicia había tomado cartas en el asunto.
“La fiscal Juliana González se ha portado muy bien y ha hecho una investigación muy interesante. Llevamos muchos testimonios de, principalmente, mujeres que fueron amenazadas hasta de muerte”, señaló la concejala. Esta causa fue encabezada no sólo por Schmuck, sino que la acompañó su par María Fernanda Gigliani.
Concejo tenso
Este año, las sesiones del Concejo municipal, se tiñeron de situaciones picantes y respecto de este tema Schmuck sostuvo: “Fue menos respetuoso. Y se discute sobre temas que todos sabemos que no nos vamos a poner de acuerdo. Que el kirchenrismo y el PRO no se pongan de acuerdo respecto del gobierno anterior o el actual, es algo que todos sabemos”.
Y afirmó que a veces la desconciertan por que no sabe a quién le hablan. “Con ese nivel de virulencia no colaboramos en nada. El Concejo debería ser un ámbito donde se escuchen argumentos. A veces uno no puede tener la posición tomada previamente en algunos temas. Hay que debatirlos. Pero están pensando más en cómo publicar en redes un video de sus posiciones que en escuchar a otro”, sentenció.
En el Día Internacional de la No Violencia a la Mujer, Schmuck aseguró que “hay un montón de desafíos por delante” y que “los temas pierdan estado público, no significan que no existan como por ejemplo el tema de la trata” de blancas.
“Son temas que nos sigue preocupando mucho porque las redes de trata no se han desbaratado, se han complejizado, son más difíciles de denunciar. Significa que son más profesionales y trabajan cada vez con más niñas y adolescentes”, apuntó. “Son verdaderos estudiosos de aquellas a las que quieren cooptar”, afirmó Schmuck.
Los femicidios también preocupan. Para la edila “hay un nivel de violencia tan importante en Argentina y también en el mundo” a la cual la calificó como “pandemia”.
“Hace un año hablábamos de que el Estado no está a la altura de las circunstancias y hoy te digo lo mismo, lamentablemente. No hay un sistema de acompañamiento a la víctima, porque están los dispositivos, pero cuando una mujer es víctima de violencia no está en condiciones de recorrer todos esos pasillos. Necesita un equipo que le diga «te resolvemos todo»”, explicó.
Continuando con el tema de los femicidios, la concejala acentuó la idea de que en la actualidad estos casos se conocen más. “Es un fenómeno que atravesó a todos los niveles sociales. Hoy las familias está más empoderada a la hora de denunciar”, dijo. “Ya no nos da vergüenza plantear el problema de la violencia”, aseguró.
Uno de los desafíos que tiene la edila es que la normativa de la nocturnidad “salga por unanimidad”. “Estoy trabajando mucho para acercar las posiciones de todos los bloques. Estoy tratado de que la noche rosarina tenga su nueva ordenanza. Requiere una actualización. Creo que estamos arribando a una muy buen ordenanza que espero que se apruebe antes de fin de año”, auguró.
Con respecto a las propuestas de los comercios al aire libre y la posibilidad de que se generen acciones para que no sólo los comerciantes puedan vender más, sino para que el rosarino vuelva a caminar las calles y a no tener miedo a la inseguridad que por estos días recorre cada rincón de Rosario. “Hay que ganarle al miedo, generando una actividad donde los vecinos ocupan el espacio público”, apuntó.
“Es el momento de la renovación”
Por último, no esquivó la gran pregunta de cara al 2019, un año absolutamente político y cuál será su futuro. “El Frente Progresista tiene una gran oportunidad el año que viene. Hay una grieta que en Rosario se está desarmando”, afirmó y amplió: “Si el Frente es lo suficientemente inteligente para renovarse puede ser un gran año. Hay que reinventarse. Hay nuevas generaciones que ya no somos los chicos, ya hemos acumulado experiencia de gestión y estamos en condiciones de gobernar esta ciudad”
“Es el momento de la renovación y la alternancia. Hay que reconocer todo lo que se hizo bien y no tocarlo, pero hay muchas cosas que están mal y para eso la gente quiere recambio y ahí estamos apostando”, concluyó.
