Una movilización convocada por la Multisectorial contra la Violencia Institucional se realizó este lunes en todo el país. En Rosario, la marcha fue desde los Tribunales provinciales hasta la sede local de la Gobernación, para denunciar los casos de “fusilamiento policial de jóvenes” y exigir una respuesta política del Estado provincial y nacional. Se trata de una iniciativa que lleva ya cuatro años, impulsada por los familiares de las víctimas, y acompañada por organizaciones sociales y políticas.

“Basta de gatillo fácil; No a la criminalización de la pobreza; No a la militarización de los barrios; Ni un pibe ni una piba menos, Ni una bala más; El Estado y los gobiernos son responsables”, fueron las principales consignas.

“Con la excusa de combatir la criminalidad, no sólo se viola el principio de inocencia y el derecho a un juicio justo, si no que directamente se asesina a sangre fría a pibes de los barios más postergados” sostuvo Pablo Basso, de la JP Evita, y agregó: “Es una cosa demencial que las Fuerzas de Seguridad sean agentes de prevención, y también jueces y verdugos”.

“Decimos que el Estado es responsable de este genocidio en goteo, ya que tanto por omisión, como en el caso de la provincia de Santa Fe que no controla políticamente a la Policía, como por acción directa, como hace Macri al felicitar a un policía que asesinó por la espalda a una persona, se trata de acciones políticas que tienden a la muerte de miles de argentinos”, señaló el joven dirigente.

Por otro lado, Basso se refirió a una consigna especial que la JP Evita llevó a la marcha de este año: la declaración de la Emergencia en Adicciones. “En paralelo a la crisis económica que azota al país, vemos como miles de nuestros pibes y pibas caen en el consumo de estupefacientes, propios de la exclusion. Las adicciones a sustancias químicas son una enfermedad, no un delito, y queremos que se trabaje directamente en el territorio esta problemática”, afirmó.

"Sabemos lo que es la pérdida"

Taty Almeida, integrante de la organización Madres de Plaza de Mayo, Línea Fundadora, acompañó a los familiares de las víctimas y explicó su presencia en la necesidad de estar junto a quienes perdieron a sus seres queridos, a causa de violencia institucional.

“Porque sabemos lo que es la pérdida de un ser querido y sabemos el papel que está haciendo la policía que tiene mano libre para matar; no para defender. Es lo que está pasando en Buenos Aires y en todas partes”, afirmó Almeida y agregó: “Le digo a las madres de las víctimas que no bajen los brazos, que sigan adelante. Que piensen que nosotras, a pesar de los bastones y de las sillas de ruedas, en algunos casos, seguimos de pie y vamos a seguir exigiendo justicia por todos”.

“Qué íbamos a pensar que después de cuarenta y tantos años, íbamos a gritar de nuevo «aparición con vida», como pasó con Santiago Maldonado. Realmente es muy serio lo que está ocurriendo. Por eso hay que poner el cuerpo y pacíficamente, pedir justicia legal, no justicia por mano propia”, remarcó la dirigente.