La principal hipótesis que manejan los investigadores sobre los ataques a balazos a Tribunales provinciales es que fueron una respuesta a la clausura de un boliche en zona sur, que fue allanado el fin de semana y donde se encontró un arma de fuego en la cocina.

El boliche en cuestión se llama Fire y está ubicado en Oroño y Uriburu, en zona sur de Rosario. El sábado a la madrugada, la Municipalidad procedió al cierre del salón por diferentes infracciones administrativas pero además las fuerzas de seguridad hallaron una pistola semiautomática Bersa calibre 9mm.

Distintas fuentes sostienen que el boliche sería parte de la maquinaria recaudatoria que aún tiene, pese a que sus jefes están presos, la banda de Los Monos.

Justamente uno de los jefes presos de Los Monos, Guille Cantero, fue imputado por ordenar desde la cárcel los ataques a balazos contra sedes del Poder Judicial.

Los integrantes de Los Monos sufrieron otro revés judicial la semana pasada, cuando fueron condenados por la Justicia federal por narcotráfico. Guille Cantero recibió una pena de 15 años de prisión.