En las últimas semanas, algunas zonas costeras de Rosario y la región amanecieron con una perceptible presencia de humo en el aire. Esta situación, según especialistas, podría agravarse con el correr de los meses ya que las condiciones meteorológicas se están convirtiendo en propicias para que esto ocurra.

Desde El mejor día de la semana (Radio 2), consultaron a uno de los referentes del Sistema de Alerta Temprana (SAT), Brian Segovia,quien explicó que las heladas tempranas que hubo en mayo, junto con las de esta semana que afectaron principalmente al área central y norte, generaron la seca de pastizales que ya se denomina como combustible (biomasa).

“Estamos en una condición neutral del fenómeno Niño - Niña. Cuando pase este invierno comenzaremos a ingresar en una Niña que traerá sequía, falta de precipitaciones y humedad. Con las condiciones actuales eso va a ir generando algunas problemáticas como por ejemplo una rápida propagación de focos ígneos”, detalló el especialista.

En esa misma línea habló también el director del Observatorio Ambiental de la UNR, Matías De Bueno. En diálogo con Radio 2, explicó que hicieron un estudio sobre cómo impacta la evolución de la altura del río en el humedal frente a Rosario. 

“Venimos de un fin de año con un río que casi llega a 5 metros y fue bajando. Para febrero de este año teníamos un 50% de cobertura de agua en el humedal. A medida que fue evolucionando se empezaron a vaciar las lagunas y en la actualidad nos encontramos con que solamente quedó entre un 15 y un 16 por ciento del humedal con agua”, sostuvo el abogado ambientalista.

A ese panorama, De Bueno le sumó que “si bien no llegamos a los niveles de biomasa (combustible) que tuvimos entre 2020 y 2022, porque las heladas llegaron antes y eso lo que provoca también es que se corte el crecimiento de los pastizales, esto ha impactado en una mayor cantidad de sequía”.

Hay una cantidad moderada de material combustible que puede ir en aumento, sobre todo en vistas a que se viene un nuevo período de Niña con lo que vamos a tener menor cantidad de precipitaciones si caen todas juntas, si se van distribuyendo a lo largo del tiempo”, confirmó el referente de la UNR.

Ante esto, desde el Observatorio Ambiental advirtieron la necesidad de “tomar medidas preventivas” para evitar la reanudación de los incendios en el período 2024 - 2025.

Sobre la necesidad de actuar, De Bueno lamentó que a nivel nacional exista una “caza de brujas” sobre las políticas ambientales. Por eso apuntó a la importancia de que los gobiernos provinciales tomen cartas en el asunto. “Son los que tienen la posibilidad de accionar rápidamente. Hablamos de Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos. Desde la Universidad siempre impulsamos que exista una fuerza de seguridad interjurisdiccional para trabajar de manera coordinada en estas acciones porque lo que se necesita es prevenir”, insistió.

“Más allá de que puedan existir accidentes -señaló-, el problema principal se daba con los incendios intencionales. Hay que generar una prevención de esos incendios. Hay que desarrollar cortafuegos, fortalecer los faros de conservación que al final consistieron sólo en montar unas cámaras, algo muy escueto con respecto a lo que se planteaba en un primer momento que tenía que ver con instalar los destacamentos en distintos lugares para llevar adelante un control de territorio. También tener los registros de los titulares de los terrenos para saber con quién hablar y la responsabilidad que tienen en prevenir”, enumeró.