Valeria Juri, una maestra de Guaymallén, Mendoza, vivió una situación que conmovió a cientos de personas. La mujer da clases en la Escuela Tierra de Huarpes, donde abundan las necesidades, por lo que siempre se mantiene atenta para ayudar a sus alumnos.

“Siempre ando mirando para abajo porque no puedo ver que mis alumnos vengan a la escuela con los zapatos rotos donde se les ven los dedos”, contó ante un medio del lugar.

Fue así que le regaló a Ciro, uno de sus alumnos, unas zapatillas para que no pase frío. Tras recibir el regalo, el nene de 13 años volvió contento a su casa.

“Ciro tuvo un gesto tan noble, que merece ser contado porque, en definitiva, yo soy la maestra, pero él es el que me enseña a mí”, indicó Valeria.

 “Vi que vino a la escuela con las zapatillas rotas y no con las nuevas que yo le había conseguido. Entonces le pregunté por qué y me respondió que se las había dado a la madrastra porque ella las necesitaba más. A esto me refiero cuando digo que yo aprendo de él”, aseguró la docente.