El Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) y la empresa Vicentín llegaron a un acuerdo temporal por tres meses –enero, febrero y marzo– en el marco del conflicto por la falta de pago de un bono extraordinario y el pedido de la empresa de concretar un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC), aunque este segundo punto fue rechazado por el gremio. De este modo, quedó en stand by la posibilidad de un paro nacional.

Los directivos de la firma concursada y los delegados gremiales acordaron en una conciliación en la Secretaría de Trabajo de Nación despejar el escenario por tres meses, en los cuales el nivel salarial se mantendrá estable para los bolsillos de los trabajadores, aunque la empresa dejará de pagar cargas más allá del salario mínimo, vital y móvil, con excepción de los aportes para trabajadores de 60 años o más, para no afectar el proceso jubilatorio.

“La Comisión Directiva y el cuerpo de delegados de la empresa Vicentin SAIC infórmanos a los trabajadores/as de la empresa que el día de la fecha hemos sido citados por la secretaria de trabajo de la Nación en el marco del expediente de pedido de apertura de procedimiento preventivo de crisis. Hemos rechazado el pedido de PPC pero en el marco de una conciliación se acordó por el plazo de 3 meses que los salarios serían idénticos con la única salvedad que una parte equivalente al salario mínimo vital y móvil será remunerativa y el resto no remunerativo”, informó el gremio.

En principio, el acuerdo señala que los trabajadores con 60 o más años continuarán con sus salarios normales y habituales, mientras que el acuerdo será por los meses de enero, febrero y marzo. Este entendimiento deja sin efecto la amenaza de un paro general del sector aceitero.

Según el sindicato, el pago de la gratificación anual extraordinaria –se abonó sólo la mitad– se completará dividiendo el saldo en una mitad a pagar el 5 de febrero, y el resto en dos partes iguales el 21 del mes próximo y el 5 de marzo.

El gremio aceptó un acuerdo temporal para garantizar salarios y evitar despidos, pero rechazó el pedido de Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) presentado por la empresa ante la Secretaría de Trabajo de la Nación.

No solo participaron representantes de la empresa, sino también del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros y Desmotadores de Algodón de los Departamentos General Obligado y San Javier, del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) Departamento San Lorenzo, y de la Federación de Trabajadores del Complejo Industria Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina.

A pesar de este avance, Vicentin sigue enfrentando incertidumbre judicial. La empresa, en concurso preventivo, aguarda que la Corte Suprema resuelva la homologación del acuerdo con los acreedores, aprobado previamente por la Cámara de Reconquista.

Conflicto en Vicentín

El Sindicato Aceitero de San Lorenzo (SOE) paralizó el 11 de enero la planta que Vicentín tiene en San Lorenzo y puso así en aprietos la continuidad de la fábrica y los puestos laborales.

Vicentín tenía que pagar el pasado viernes un bono extraordinario que el gremio impulsó y que representa medio sueldo, pero no pudo hacerlo y por eso se activó la protesta gremial.

La empresa venía advirtiendo que está muy justa de caja producto de su situación concursal (en el marco de un escenario muy ajustado para todo el sector aceitero) y pagó los aguinaldos junto con los sueldos de diciembre. Pero no pudo pagar el bono.

Ante esta situación, Vicentín emitió un comunicado pidiendo al personal que tenga paciencia, y que siga trabajando porque de esa manera van a juntar los fondos. Pero el gremio hizo caso omiso y paró la planta de San Lorenzo por tiempo indeterminado.

El 15 de enero, tras cuatro días de paro de los trabajadores aceiteros en las plantas de Vicentín en Ricardone y San Lorenzo, la Secretaría de Trabajo de Nación dispuso la conciliación obligatoria por 15 días y, por ende, la suspensión de la medida de fuerza.