Rosario y la región lidiaban este viernes con el saldo de una intensa tormenta que dejó imágenes impactantes en varias localidades, incluida Casilda, en donde ya el jueves hubo destrozos a raíz de las ráfagas de viento de hasta 114 kilómetros por hora.
El secretario de Protección Civil de Santa Fe, Marcos Escajadillo, apuntó que Casilda fue una de las localidades más afectadas, lo que quedó constatado por imágenes registradas este viernes por el El Tres.
A través de un plano aéreo se pudo ver en detalle una de las consecuencias de la tormenta: dos casas que quedaron destechadas por la ráfagas de viento del jueves. Visto desde arriba, se veía cómo los moradores trabajaban para remover el agua y limpiar ya cuando las concidiones habían mejorado.
"Fue como un tornado", describió en diálogo con De 12 a 14 una vecina, que agregó que el viento arrancó las canaletas de su casa y también provocó que una rama que se desprendi. de un árbol terminara incrustada en una de sus ventanas. Según recordó, la última vez que ocurrió una tormenta de esta intensidad fue en 1986.
Otro vecino comentó que también había personas que se habían quedado sin agua y sin luz ya desde el jueves.
Luis, el dueño de una de las casas que se quedó sin techo, apuntó que los daños solo fueron materiales. "Estamos todos bien. Cuando sucedió esto no estábamos en el domicilio", indicó en relación con la situación de su familia.

El techo de su casa se desprendió con tal intensidad que, más allá de que la mayor parte de las chapas y los pilotes quedaron tendidos sobre plantas linderas, también hubo partes de la estructura que impactaron contra otra vivienda de la misma cuadra y contra un auto que estaba estacionado.
Ahora debían afrontar las reparaciones, para las que Luis pedía colaboraciones. "Me destrozó. Perdí todos los muebles porque cuando llegué estaba todo mojado", lamentó, y añadió que también perdieron ropa y que hubo paredes que quedaron dañadas.
El dueño de la casa en la que impactó parte del techo que se voló contó que todo ocurrió momentos después de que sus hijos salieran y mientras había niños jugando en la zona.
"Esto nunca lo ví", sostuvo el hombre, que estaba cerrando su panadería cuando las ráfagas de viento se intensificaron. "Veía cómo se venía el techo encima mío", relató.