Una ONG ambientalista presentó una denuncia por contaminación contra la ex Ar Zinc SA, empresa que controla la multinacional Glencore, y contra el municipio de Fray Luis Beltrán, porque desde el cierre de la planta, hace más de 4 años, "se mantienen esparcidos en el predio y sus inmediaciones elementos altamente nocivos como lo son el ácido sulfúrico y cadmio, que utilizaba en su proceso productivo".

La demanda de amparo iniciada por la ONG Equística Defensa del Medio Ambiente se tramita ante el Juzgado de Distrito Civil y Comercial Nº 2 de la ciudad de San Lorenzo y señala también el "incumplimiento de Ar Zinc en la presentación del plan ambiental de cierre, lo cual conllevaría responsabilidades no solo para la sociedad sino también para el propio municipio". A su vez, solicita a la jueza que ordene a la empresa y al municipio a cesar urgentemente la afectación al medio ambiente y los riesgos que el abandono ambiental conllevan para la salud de los vecinos y la región.

La denuncia explica que "según la Organización Mundial de la Salud la exposición al cadmio por períodos prolongados de tiempo altera los procesos bioquímicos y fisiológicos ocasionando diversas patologías: cuadros de anemia, disfunción renal, cálculos renales, osteoporosis, osteomalacia, trastornos respiratorios, hipertensión, trastornos nerviosos (cefalea, vértigo, alteración del sueño, temblores, sudoración, paresia, contracciones musculares involuntarias), pérdida de peso y apetito, cáncer de próstata y pulmón. A su vez, puede acumularse en riñones por períodos de hasta 30 años". 

Y agrega: "El ácido sulfúrico es altamente peligroso también. La Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (Iarc) concluyó que existe suficiente evidencia de que la exposición ocupacional a fuertes rocíos de ácido inorgánico que contienen ácido sulfúrico, es cancerígeno para humanos (principalmente cáncer de laringe y de pulmón)".

"No obstante la reconocida peligrosidad de tales materiales, han pasado 4 años desde el conflictivo cierre signados por un llamativo silencio tanto empresarial como político; 4 año. con el pasivo ambiental librado a su suerte y poniendo en riesgo la salud y el medio ambiente, a los vecinos y a la región", suma.

Ar Zinc SA y su propietaria Glencore enfrentan varias denuncias por contaminación.

Sin plan de cierre ambiental

Ar Zinc SA comenzó a operar en 1950 (por entonces, llamada Sulfacid SA). Fue pionera en Argentina en el mercado del zinc electrolítico y del ácido sulfúrico. Ello despertó el interés de la gigante suiza Glencore, que en 2005 adquirió su paquete accionario.

Tras casi 56 años de funcionamiento, Ar Zinc SA. tuvo un conflictivo cierre en febrero de 2016, en que dejó a todos sus trabajadores sin su fuente de trabajo y a Fray Luis Beltrán y la región con un foco contaminante y con potencialidad de la afectación a la salud. 

El 4 de marzo de 2016, mediante un comunicado oficial, la empresa anunciaba que, además de haber arribado a un acuerdo con el 88% del personal despedido, a partir de entonces comenzaría el plan de cierre ambiental. 

Sin embargo, a la fecha, la empresa no concluyó (y desde la ONG afirman que ni siquiera ejecutó) el “plan de cierre ambiental” anunciado hace ya 4 años.

“Tan sólo con transitar por avenida San Martin a la altura de la empresa se pueden observar montañas de residuos industriales, dejados a la intemperie por Ar Zinc SA, así como el abandono absoluto de sus instalaciones”, afirma Víctor Hugo Schmid, presidente de la ONG. 

La falta de presentación del plan ambiental para esa planta importa en los hechos que los elementos contaminantes podrían generar daños ambientales irreparables, así como gravísimas consecuencias para la salud para los vecinos del barrio y del cordón industrial en general. 

Perfil de Glencore

Glencore es una empresa multinacional con sede en Suiza, fundada en 1974 y que en 2005 se convirtió en la empresa líder en comercio de materias primas (metales-minerales, petrolíferas y productos agrícolas).

El sector agro de Glencore en Argentina cuenta con puertos en Rosario, Necochea y Bahía Blanca; fábricas de aceite en General Villegas, Daireaux y Timbúes; plantas de agrocombustible en Rosario y Pilar; y una red de acopio en toda la Pampa Húmeda. 

Su fundador, Marc Rich, estuvo en la lista de los más buscados del FBI durante casi 20 años, hasta que fue indultado por el ex Presidente estadounidense Bill Clinton en el último día de su mandato.

Pero aquel origen no impidió su expansión. Considerada hoy la cuarta empresa minera más grande del mundo y la primera comercializadora de materias primas a nivel global. Hoy por hoy Glencore controla el 60% del comercio mundial de zinc, el 50% del de cobre y el 45% del de plomo.
Además de adquirir en 2005 la ex Sulfacid SA, la cual pasó a llamarse Ar Zinc SA, en Argentina es propietaria también de Minera Alumbrera (extracción de oro y cobre en Catamarca), Pachón (San Juan), Mina Aguilar (Jujuy), Oleaginosa Moreno (La Pampa) y Molino Libres (Corrientes).

Los niveles de contaminación de Glencore son tales que se conformó en 2012 la “Red Sombra Observadores de Glencore”, para compartir experiencias e investigar sus actividades, que según la red están generando estragos a lo largo y ancho del planeta.

La Red Sombra presentó un informe que detalla que sólo Minera Alumbrera cuenta con un permiso de la provincia de Tucumán para extraer 100 millones de litros diarios de agua subterránea. “Es el consumo hídrico más alto de las operaciones de Glencore en América latina”, afirma el informe.

El informe denuncia que “Glencore enfrenta más de 40 investigaciones y sanciones administrativas y judiciales en varios países por graves daños e impactos ambientales, como contaminación de personas, aire y suelos, desviación ilegal de ríos e intervención ilegal en áreas protegidas”.