Cada 28 de mayo se celebra el Día de los Jardines y de las maestras y los maestros del nivel inicial. Pero este año fue muy especial, ya que los niños y las niñas debieron improvisar un festejo en las puertas de sus casas, lejos de las ruidosas y concurridas celebraciones de años anteriores, que también incluían disfraces y hasta carruajes.

El Día de los Jardines de Infantes y de sus docentes fue declarado en memoria de Rosario Vera Peñaloza, quien nació el 25 de diciembre de 1873 en el pueblo riojano de Atiles. Esta pionera de la educación argentina fundó en el año 1900 el primer jardín de infantes del país.

En Rosario y en todas partes del país, se organizaron actividades a distancia para festejar este día pero también para poner en valor el esfuerzo que están realizando los chicos y chicas del nivel inicial para sobrellevar esta etapa de confinamiento.

En algunos sitios, las y los maestros se organizaron para llevar a cabo una pequeña caravana, de no más de tres o cuatro años, que con todas las prevenciones del caso llevaron color y música por las calles de los barrios.

En otros, los frentes de los jardines fueron decorados con trabajitos que los niños y niñas hicieron en sus casas y luego fueron acercados al establecimiento.

La jornada incluyó un saludo del ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, quien instó a los docentes a seguir trabajando con entusiasmo para el retorno de las clases presenciales cuando las condiciones sanitarias lo permitan.