La rosarina Nadia Podoroska, que viene de obtener el título en el torneo ITF W60 de Saint Malo, en Francia, habló en Radio 2 sobre su gran presente profesional y agradece poder ir a contramano de lo que le pasa a la gran mayoría de la gente en el marco de la pandemia.

A pesar del contexto viene siendo un gran año para mí. Había tenido un gran arranque ganando dos títulos, después la pandemia paró todo, me vine a España cuando pude para seguir entrenando y ahora en el regreso puedo seguir compitiendo en un muy buen nivel”, dijo en Zapping Sport.

Podoroska contó detalles de cómo es competir en un deporte de elite en este marco de restricciones y cuidados: “Tenemos protocolos bastante estrictos. Apenas llegamos a los torneos nos aíslan en una habitación y no nos dejan salir hasta que no tengamos los resultados. Eso suele tardar entre 24 y 48 horas. Después del resultado negativo recién podemos ir al predio del torneo a entrenar”, dijo. Y agregó: “Cada cuatro días nos hacen un test”.

La Peque viene de vencer a la española Cristina Bucsa por 4-6 7-5 y 6-2 en la final del reciente torneo francés y alcanzó su mejor ranking en la WTA, ascendiendo 35 puestos. Hoy está la ubicación 130.

“Hoy más que mirar el ranking estamos mirando detalles de mi juego para seguir mejorando. A medida que compita con mejores jugadoras y pueda estar a la altura el ranking va a seguir bajando”, agregó Podoroska.

Cuando ganó el Panamericano, en 2019, su objetivo era mantenerse entre las 300 mejores del mundo para entrar a los Juegos Olímpicos de Tokio.

Antes de la pandemia, la rosarina había decidido radicarse en España para poder estar cerca de los torneos importantes y no tener que asumir los costos de vuelos de Argentina a Europa cada 15 días. Podoroska entrena en Alicante y piensa en Roland Garros, su próximo objetivo.

Además, agradeció el saludo de Gabriela Sabatini después del título del fin de semana: “Es muy especial por cómo es personalmente y por lo que fue como tenista”, dijo.

Y cerró con un deseo: “Mi sueño es que el tenis femenino pueda crecer en Argentina, que cada vez sea más fácil para las chicas poder insertarse en el circuito, tener torneos importantes y que no tengan que hacer como yo que me tuve que venir a Europa para poder jugar