Boris Franz Becker es un ex tenista alemán que fue número uno del mundo y tres veces ganador de Wimbledon. Pero sus días no son sencillos: a sus 51 años, quedó en bancarrota y ahora decidió subastar sus principales recuerdos en su carrera deportiva para tratar de levantar sus deudas.

Según informó el periódico germano Bild, se trata de 82 objetos relacionados con su extensa carrera deportiva que serán rematados en Internet, entre los que se encuentran una una copia de la Copa del Us Open 1989 (hecha por el joyero Tiffany) la Challenge Cup, otorgada a Becker tras las victorias en Wimbledon en 1985 y 1986.

Wimbledon, rendido a los pies de Boris Becker.


También se subastarán la medalla como finalista de Wimbledon 1990, sumado a otros varios trofeos, relojes, raquetas de tenis, fotos, ropa y zapatillas, utilizadas en su recorrido. La venta se realizará on line a partir del próximo lunes por la casa británica Wyles Hardy.

Becker fue declarado en bancarrota ya en 2017, pero sus problemas económicos habían comenzado en el 2002, cuando un tribunal alemán lo condenó a 2 años de cárcel, que quedaron en suspenso, y a una multa de medio millón de euros, en impuestos atrasados al fisco de su país. A ello se le suma deudas impagas, con la justicia española, por su mansión en Mallorca.

Becker fue el coach del serbio Djokovic hace algunos años.


Un año antes, en 2001, Becker se vio obligado a reconocer como su hija a Anna, fruto de su relación con la modelo rusa Anzhela Ermakova, que finalizó en un millonario divorcio, y el pago de 5 millones de dólares para llegar a un acuerdo.

Becker fue ganador de 6 Grand Slams y 49 torneos a lo largo de su carrera. Venció en el Abierto de Australia dos veces (1991 y 1996), Wimbledon en tres ocasiones (1985, 1986, 1989, el primero siendo el más joven de la historia, con tan solo 17 años) y el Us Open (1989).

Por otra parte conquistó la Copa Davis en dos oportunidades con la selección alemana (1988 y 1989). Desde la temporada 2014 hasta 2016 fue el entrenador del tenista serbio Novak Djokovic.