El entrenador de Rosario Central, Carlos Tevez, puso este domingo en duda su continuidad luego del empate con Platense y culpó a los dirigentes de no “ponerse de acuerdo sobre qué quieren para el club”, luego de una semana convulsionada por la fecha de las elecciones en la institución de Arroyito.

El Apache habló poco de fútbol y mucho de la crisis generada por el corrimiento de los comicios por “irregularidades” y se quejó: “¿Con quién hablo para armar el equipo?”

“Esta semana lo voy pensar tranquilo. Hablaré con mis allegados y tomaré una decisión porque así es muy difícil seguir”, avisó Tevez en conferencia de prensa, con respecto a la continuidad de su cargo en el banco canalla.

En ese sentido reclamó: “Tanto el oficialismo como la oposición tienen que sentarse a hablar si quieren lo mejor para Central. ¿Cómo armo el equipo para el año que viene? ¿Con quién tengo que hablar por las incorporaciones, por los contratos que se vencen, por quién quiero y a quién dejo libre?”.

“Nosotros tenemos la pretemporada armada –continuó– y los nombres de jugadores que queremos pero así es muy difícil. En enero empieza el otro campeonato. Entonces pónganse de acuerdo. Nosotros nos bancamos que hasta acá nos echen la culpa y todas las que vengan, pero ¿con quién hablo por incorporaciones?”.

Sobre ese tema, el entrenador se sinceró: “Hay que decirle la verdad a la gente, para comprar tenemos que vender, porque Central no tiene plata. Los que están poniendo el pecho son los chicos y la están pagando ellos, pero más no les podemos pedir”.

Sobre el 1-1 ante el Calamar, Tevez analizó: “Dejamos dos puntos. Siempre somos superiores pero no podemos hacer los goles, no está costando muchísimo, hay que seguirlo trabajando”.

Y cerró: “El segundo tiempo fue mucho más complicado. Teníamos tres lesionados adentro de la cancha. Tuvimos la mala suerte de que se lesionen cuando no teníamos cambios. Eso hizo que no pudiéramos seguir atacando”.