El clásico rosarino está dentro de los mas importantes del país, es el más pasional, el mas colorido, el que moviliza a muchos hinchas de ambas instituciones en la previa, durante y mucho tiempo después de realizarse el cotejo. Tan visceral es el partido que hasta se instauró el día del banderazo en la parcialidad rojinegra. Está la palomita de Poy en los canallas y podemos mencionar muchísimos ejemplos que ratificarían la teoría de por qué detrás de River y Boca, este cónclave futbolero está entre los mas destacados de la Argentina.

Los jugadores, los protagonistas, lo viven a pleno pero también aquellos que son ex jugadores y que tuvieron la posibilidad de disfrutar de este evento siguen recordando con nostalgia esas sensaciones que producía enfrentar el rival de toda la vida, y en primera persona lo recuerdan Ignacio Scocco y Maxi Rodríguez, que hablaron en un mano a mano con El Tres

"Hay que tomarlo con pasión, con naturalidad todas estas cosas, y vivirlo de esa manera", apuntó MR11. Y agregó "Es el mejor clásico del país; hay otros clásicos pero este se vive diferente, no sé si es mejor o peor pero me tocó vivir éste y es el que decidí jugar", aseguró Rodríguez.

El encuentro del domingo se jugará sin público visitante, a pesar que los directivos de Newell's le habían solicitado a sus pares de Arroyito la posibilidad que fuera la gente leprosa al Gigante y después retribuirles esa gentileza cuando se dispute en el Coloso. Pero la directiva auriazul se negó por entender que era poco el tiempo para organizar tal acontecimiento. Quedó la sensación que faltó predisposición mas que tiempo organizativo.

Sobre este tema puntual, Ignacio Scocco dio su mirada. "Depende del público que entienda, que tiene que ser una fiesta, que tiene que disfrutar. A veces podés ganar o perder pero hay que aceptarlo, respetar al que gana y estar tranquilo cuando se pierde", comentó el goleador.

Ambos vivieron la fiesta futbolística de la ciudad con público de ambas parcialidades en los dos estadios y pueden opinar con argumentos sólidos con respecto a lo que se siente dentro del terreno de juego y en las tribunas. "Nos tenemos que dejar de romper las bolas con los dirigentes que a veces, dicen 'no, porque el hincha se va a enojar conmigo'. Un día le tocará a uno, otro día al otro, tenemos que empezar a dar ejemplos, pero si no se hace desde arriba se hace muy difícil", aseguró Maxi Rodríguez.

Pero el ex hombre del Liverpool, Peñarol, Atlético Madrid entre otros se animó a ir un poco mas allá: "Se tendrían que jugar partidos de verano, clásicos en esa época así todo es una fiesta, que todo se disfrute, no solo en Rosario sino en todos lados del mundo. Le hace bien al fútbol, ya bastantes problemas tenemos para tener otro más los domingos".

Nacho también señaló que muchas veces depende de la gente los cambios: "Hay que respetar al que gana y estar tranquilo cuando se pierde. Esa es la manera de cambiar, ojalá se pueda hacer, se pueda lograr y que la gente viva esto como fiesta, como realmente es".