Newell’s despidió el semestre de la peor manera posible, jugó pésimo frente a Instituto y este jueves perdió 2-0 en el Coloso por la quinta fecha de la Liga Profesional, la última antes del receso por la Copa América. Gastón Lodico, en el arranque del partido, e Ignacio Russo convirtieron para la Gloria, que se impuso con autoridad sobre el equipo del interino Adrián Coria e igualó la línea de los punteros.

En una verdadera noche de terror del equipo, la paciencia de los hinchas se agotó rápidamente y durante gran parte del encuentro así lo hicieron sentir con insultos y reclamos a los jugadores y al presidente Ignacio Astore, que debe elegir junto al resto de la dirigencia al nuevo entrenador –tras echar a Larriera– en un contexto delicado. 

La Gloria madrugó al equipo de Coria y se puso en ventaja rápidamente en el Coloso. A los 8 minutos, Russo lideró un contragolpe sobre la banda izquierda, cambió de frente para Rodríguez y el punta asistió a Lodico, quien la empalmó con derecha y la clavó en el ángulo para anotar el 1-0. 

Newell’s la pasó mal durante esos primeros pasajes del partido y le concedió grandes ventajas al equipo cordobés, que aprovechó los espacios al máximo y lo lastimó, sobre todo por los costados. El equipo repitió errores del pasado reciente y tuvo serios problemas en el retroceso.

Así, la visita estuvo muy cerca de ampliar la diferencia y eso desencadenó, antes de la media hora de juego, el reclamo con insultos de los hinchas rojinegros hacia los jugadores porque la Lepra no reaccionaba. Sólo las manos de Hoyos lo mantuvieron a tiro. 

La respuesta leprosa llegó a los 31 minutos, cuando Banega puso a correr a Martino por la banda zurda, el lateral lanzó el centro y se armó un gran barullo en medio del área. Panchito González no llegó a rematar porque lo trabaron, un defensor quiso despejar y la pelota pegó en Aguirre. Ahí fue cuando Ramírez puso el pie y convirtió la igualdad. 

Sin embargo, al árbitro Lamolina lo llamaron desde el VAR porque el balón, antes del puntazo del Colo, había rebotado en las manos de Aguirre. El juez revisó la jugada en la pantalla y decidió anular la conquista. Ni esa le salía a los rojinegros.

Sobre el cierre de la primera etapa Newell’s tuvo otras dos chances de igualar con un disparo de Cacciabue que dio en el travesaño y un cabezazo defectuoso de Ramírez en una buena posición, por lo que se fue al descanso abajo y con mucho para corregir en el entretiempo. 

Coria pateó el tablero y realizó tres cambios para salir a jugar el complemento. Entraron Franco Díaz –recibido con algunos silbidos–, Leonel Vangioni y Guillermo May en reemplazo de Cacciabue, González y Aguirre.

Si bien la Lepra fue a buscar la igualdad como pudo, sin demasiadas ideas de cómo lastimar al rival, el trámite y el partido quedaron a pedir de la Gloria por la enorme cantidad de cancha y espacio que quedaban entre el medio y la defensa rojinegra.

La ambición llevó al equipo leproso a tener sus chances frente al arco de Roffo como una clarísima de May, tras asistencia de Ramírez, que el arquero le llegó a tapar, pero la desesperación también lo hizo quedar demasiado expuesto atrás y eso la visita no lo dejó pasar. 

En la réplica a la jugada de los uruguayos, una contra letal de Instituto terminó con varios hombres de la Gloria prácticamente sin marca dentro del área de Hoyos. Ignacio Russo, el hijo del técnico de Central, convirtió el 2-0 y desató la furia de los hinchas en el estadio.

Al partido le sobraron unos 35 minutos. La Lepra intentó pero jamás comprometió la victoria de los cordobeses en el parque Independencia. En el cierre del semestre y todavía sin entrenador, el equipo rojinegro parece haber tocado fondo.

Resumen del partido