El plantel femenino del handball de Estudiantes de La Plata denunció que un empleado municipal de seguridad de San Fernando (Buenos Aires) las grabó sin consentimiento mientras se bañaban en el vestuario del Polideportivo Municipal.
El sábado, el club platense visitó a su par de San Fernando por la fecha 3 del Torneo Apertura y, tras finalizado el encuentro, sucedió un aberrante hecho que involucró al plantel del Pincha y a un empleado municipal de seguridad del club del norte del Gran Buenos Aires.
Alrededor de las 22, una jugadora denunció que se cambiaba en el vestuario junto a sus compañeras cuando observaron que Lucas B., empleado municipal, las fotografiaba sin consentimiento.
Tras este hecho, las deportistas dieron aviso a los empleados municipales presentes y se trasladaron a la comisaria donde radicaron la denuncia. Allí, mantuvieron comunicación telefónica con la Fiscalía de Género, la cual dispuso carátula epígrafe y secuestró el celular del acusado.
La versión del empleado municipal indica que él les dijo que se podían bañar en las duchas de varones ya que en el otro vestuario no había agua caliente y que él las cuidaría. Allí fue cuando sucedió el hecho que derivó en denuncia.
El caso de Rosario
Un caso similar ocurrió en enero último en Rosario, cuando jugadoras de básquet de El Talar de Buenos Aires, equipo campeón en el Torneo Apertura de la Liga Nacional Femenina, denunciaron un hecho de acoso que sufrieron en las instalaciones del club Naútico Avellaneda, en el marco de una visita que hizo el plantel para disputar la tercera fecha del torneo. Según expusieron, fueron grabadas mientras se bañaban. En consecuencia, el partido fue suspendido.
Sin embargo, más de un mes después el Tribunal de Disciplina decidió sancionar al equipo porteño por no presentarse a jugar y con el argumento que el club no presentó documentación fehaciente sobre la denuncia realizada en Fiscalía.