Newell's derrotó 2 a 0 a Arsenal en el Coloso Marcelo Bielsa por la fecha 16 de la Liga Profesional. El rojinegro era favorito, debía ganar y estaba necesitado. Todo eso generaba cierta presión, pero la Lepra lo pudo resolver desde la jerarquía de Ramiro Sordo. Dos goles, uno en cada tiempo para abrir y cerrar el partido. 

No era fácil porque todo estaba configurado para que Newell's gane. Se sabe que el fútbol se ríe de la lógica y suele proponer sorpresas cuando nadie las espera. SI embargo, nada de eso ocurrió. Newell's cumplió y sus hinchas se lo valoraron. 

El primer tiempo fue todo del equipo de Heinze. Manejó el trámite del juego a discreción, recuperó la pelota a los pocos segundos de haberla perdido, atacó por las bandas; sobre todo con Sordo y Méndez. Pero se dilataba la apertura del marcador. Y apareció por afuera. En un desborde de Pittón, Sordo la tomó en la puerta del área y con tiro suave al palo abrió el partido. 

El complemento fue distinto. Newell's bajó la velocidad de pase y se dedicó a manejarla lejos del área rival. El partido se transformó en un bodrio. Se puso aburrido, casi una foto. Nadie se movía. 

Sin embargo, volvió a aparecer Ramiro Sordo, el único que cambió el ritmo y cerró la historia. Fue Sforza el que tiró un pase notable al vacío para el pique de Pérez Tica. El delantero no pudo ante Medina, pero Sordo estaba ahí para empujarla. Bien de goleador. 

Pasaron ocho fechas en el torneo local para volver a ganar en casa, casi dos meses. Hubo otras buenas victorias en el medio, una de visitante ante Racing y otras en el Parque pero por la Copa Sudamericana. La cuenta ya está saldada. Hizo lo que tenía que hacer. No es poco. 

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Newell’s Old Boys