1 – Norberto Scoponi: “Un arquero que amaba atajar. El Gringo quería estar en todos los partidos, siempre tenía ganas de estar. No dejaba el arco nunca, mucho menos en las circunstancias más adversas. Su presencia, casi perfecta como titular, la sufrieron todos los arqueros suplentes que tuvo en Newell’s. Con él me toco convivir cuando daba mis primeros pasos en la primera de Newell’s. A su lado, aprendí muchísimo, sobre todo cómo debe comportarse y como no debe regalar ni un minuto de titularidad un futbolista profesional”.
2 – Gustavo Costas: “Un DT conciso con sus premisas y muy eléctrico para dar las indicaciones durante el partido. Gustavo me dirigió en Racing, fue una de las etapas más lindas de mi carrera. Con él como entrenador mejoré en lo físico, en lo táctico y logré afianzarme en la primera división del futbol argentino. Por ser fanático de Racing, todo lo que logró en el club, para él y los hinchas, tiene un valor doble”.
3 – Eduardo Berizzo: “Un futbolista que admiré y una persona que admiro. En Newell’s compartí muy poco tiempo porque se fue a River cuando a mí me subieron a la primera división. Nuestras carreras continuaron y en determinado momento, tenía todo acordado para ir a River y ser nuevamente su compañero, pero lamentablemente se cayó la transferencia y me fui a Morelia. Hoy tengo contacto con él porque estoy en un grupo de whatsapp, que integramos todos ex jugadores del club que se llama, los ex campeones de Newell’s”.
4 – Claudio Úbeda: “Un referente de una gran época de Racing. El Narigón era el capitán cuando llegué al club. Fue el primer compañero que se me acercó, me brindó su apoyo y me ayudó para que me adapte más rápido en un plantel con muchas figuras. Hoy tenemos una relación de amistad que va más allá del futbol”.
5 – Carlos Trullet: “El DT que más defectos me corrigió en mi carrera. En mi paso por Unión, con Carlitos viví algo especial. Cuando llegué al Tate, él era el entrenador, me dio la bienvenida y me aclaró: “Pablo no sé si vas a ser titular, lo que si sé, es que vas a tener la oportunidad de jugar, pero solo depende de vos”. Cuando me dio la posibilidad de ser titular, no salí más del equipo. En Unión con Trullet como entrenador, pasamos tres temporadas muy buenas, salimos campeones y logramos el ascenso”.
6 – Mauricio Pochettino: “Un señor jugador y entrenador. En el poco tiempo que compartimos plantel en Newell’s, me enseñó, con hechos y profesionalismo, la enorme responsabilidad que tiene un jugador adentro de una cancha. Es una persona excelente”.
7 – Ángel Cappa: “El DT que me hizo disfrutar adentro de una cancha. Ángel es parte de mi vida. Me dirigió en Racing y gracias a él, aprendí, crecí y disfruté de ser jugador de futbol. Me marcó hasta mi último día como futbolista profesional. Es un entrenador con conceptos claros, directos y justos. Con Cappa aprendés sí o sí. Es un grande y es mutuo el amor que nos tenemos”.
8 – Gerardo Martino: “¡Un maestro! El Tata fue un educador y un espejo para mí. Fue mi referente, si hasta me vendaba arriba de las medias como lo hacía él. Me encantaba como jugaba, y cuando lo conocí afuera de una cancha, comprobé que es la excelencia hecha persona. Lo aprecio mucho y me alegra muchísimo que le vaya tan bien como entrenador”.
9 – Luis Artime: “Un futbolista con una moral de acero. El Luifa tiene un gran amor propio y es un gran motivador. Jugamos juntos en Belgrano, no vi otro igual, que siendo titular o suplente, aliente y apoye a sus compañeros para que las cosas salgan bien, como lo hacía él. Fue admirable su compromiso con todos los integramos aquel plantel. En Belgrano merecidamente lo adoran y es ídolo”.
10 – Rubén Capria: “Un profesional muy disciplinado y muy correcto para decir las cosas. Rubén amaba y disfrutaba de entrenarse bien. Tenerlo como compañero, fue un privilegio para mí y que pocos jugadores se pudieron dar. Lo disfruté mucho y tengo el mejor de los recuerdos del Mago”.
11 – Diego Latorre: “¡Un crack! Dieguito siempre fue igual conmigo y eso lo valoro mucho. En Racing me tocó compartir y disfrutar de muchos momentos hermosos con él. Lo apoyé y lo banqué siempre, inclusive cuando se mandó alguna macana. Tenemos, hasta el día de hoy, una gran relación. Lo quiero mucho”.
