Las historias de los jugadores de fútbol que están o estuvieron varados por el mundo se repiten en distintos continentes. El COVID-19 complicó a todos los profesionales y muchos tienen historias para contar, como es el caso del Polaco Francisco Fydriszewski, quien desde enero se desempeña en el club Liga de Portoviejo de Ecuador, país en el que la pandemia dejó 24.675 infectados y 883 muertos.

El hombre que pertenece a Newell's contó a Rosario3 su experiencia en un país que tuvo momentos complicados. “Yo estaba en Manta, a 200 kilómetros de Guayaquil, el lugar mas complicado de Ecuador. Se veían cadáveres en las calles y yo tuve varios compañeros que perdieron familiares por Coronavirus”, manifestó el atacante.

"Estar lejos es difícil y se complica todo. No podía volver a la Argentina y quería estar acá. Salió un vuelo desde Quito para nuestro país que era de Aerolíneas Argentinas, pero no podía llegar. Guayaquil fue el lugar mas complejo de todos. Ahora estoy mas tranquilo, porque estoy con mis afectos acá en Bermúdez", narró.

La liga de Ecuador aún no fue dada por finalizada: "Estamos en la cuarta fecha: nosotros ganamos uno, empatamos uno y perdimos uno. Las autoridades decidieron que se siga el certamen, no dieron por terminado el campeonato así que no sabes que va a pasar. Arranqué con 3 goles en estos cuatro partidos, así que estoy contento con el rendimiento.". 

"Mi contrato finaliza el 31 de diciembre, así que cuando pase la cuarentena tengo que regresar. De allí veré qué pasa con mí futuro, porque sé que hay algunas ofertas o interés de clubes, pero por ahora no sé nada más, tengo que volver a Liga".

Así quedó la camioneta del delantero leproso.


Una feroz autocrítica

El delantero sigue perteneciendo a la Lepra, ya que en diciembre debe volver a Newell's. Y el Polaco aún se lamenta de la manera en que debió salir a préstamo de la entidad: un siniestro vial a la madrugada y una posterior pelea con un policía.

"Lo que me pasé en ese accidente fue porque me rodeé de gente que no tenía que haber tenido en mi vida. Me aconsejaron mal. Y uno viene con un buen momento, es reconocido y te juntás por ahí con gente que no me suma. Eso me llevó a realizar cosas como lo que ocurrió esa noche", confesó.

"Por suerte tengo una excelente familia que me apoyó y por eso me pude recuperar, salir y encaminar nuevamente mi vida", dijo.

Para el delantero, Newell's "significa todo: soy hincha fanático, pero hice mal las cosas y se pagan las consecuencias. Me fui de Newell's para tomar aire y para limpiar mi imagen".

"Tuve lugar con Kudelka en la primera etapa, pero después sentí que no lo tenía. Sé que voy a volver, sé que podré tener revancha, me siento bien fisicamente y futbolísticamente porque me preparo en doble turno para estar de la mejor manera. Espero poder tener una nueva oportunidad en el club", cerró.