El escándalo desatado en el Torneo Federal A del ascenso argentino sumó este martes la renuncia del presidente del tribunal de disciplina. Es el coletazo más fuerte e importante después de la sentada que hicieron los jugadores de San Jorge de Tucumán en medio de la final por el ascenso a la B Nacional ante Alvarado de Mar del Plata luego de que el árbitro Adrián Franklin les expulse dos jugadores y amoneste seis.
"Es público y notorio que el arbitraje fue amañado", dijo de forma contundente Antonio Raed al renunciar a su cargo. "Generó estado de nerviosismo y sacó de eje a uno de los equipos. No quiero justificar reacciones por parte de estos muchachos, pero que las cosas se den de un modo tan amañado y digitado", expresó a LV12 Online. sobre la decisión de los jugadores tucumanos de no jugar más el partido en forma de protesta por el mal arbitraje.
"Se cagan en el trabajo nuestro. Es increíble. No pueden hacer esto. Es un robo", dijo el jugador del elenco tucumano Maximiliano Guardia antes de dejar el terreno. En tanto, el Consejo Federal deberá resolver por estas horas si le da por ganado el partido al conjunto marplatense u ordena que se jueguen los 40 minutos restantes para definir el ascenso.
El caso de San Jorge no fue el único que se dio durante la temporada. San Martín de Mendoza y Atenas de Río Cuarto también se retiraron de la cancha considerando que estaban siendo perjudicados por los arbitrajes.
Incluso, el caso más grave fue el de Estudiantes de Río Cuarto que se consagró campeón bajo un manto de sospechas que se consolidaron cuando uno de los futbolistas del plantel, Juan Tejera, reveló en un audio de Whatsapp que el ascenso había estado "arreglado". El futbolista no se presentó ante el Tribunal de Disciplina a declarar y fue suspendido por seis meses.
