Rosario Central tuvo un buen debut este domingo en la Superliga, con un triunfo por 1-0 sobre Banfield en el Gigante, que vivió el regreso de Edgardo Bauza como entrenador.

El Canalla no brilló pero mostró firmeza tanto atrás como adelante y se impuso con un gol de Matías Caruzzo, de cabeza, a los 9 minutos del segundo tiempo.

 

En el primer tiempo, de pelota parada y por aire fueron las mejores situaciones de Central: un tiro libre de Federico Carrizo que sacó al volar Iván Arboleda, otro tiro indirecto que cabeceó Washington Camacho muy cerca del palo y un segundo testazo, de Marco Ruben, también cerca. Y sobre el final, un córner que terminó en un gol anulado por offside.

En el segundo, el local también fue superior. Sin avasallar a su rival, controló siempre el partido y mayormente la pelota (55% de posesión) y tras un muy buen centro del Colorado Gil encontró rápido el gol en la cabeza de Caruzzo.

Pudo haber ampliado el elenco del Patón pero se encontró con la figura del arquero colombiano, que evitó un resultado más abultado. Igual, hubo festejo y conformidad en las tribunas del Gigante tras esta presentación de un equipo que promete protagonismo.

Bauza ya había debutado por los puntos en la goleada ante Juventud Antoniana de Salta por la Copa Argentina, pero esta vez, emocionado al salir a la cancha, lo hizo delante de su público luego de una extensa carrera que lo vio ganar la Copa Libertadores en dos ocasiones y hasta dirigir a la selección.

Julio Falcioni tuvo varias bajas sensibles y debió improvisar con nombres que no son habitualmente titulares. Los que se lo perdieron fueron Darío Cvitanich, Enzo Kalinski y Nicolás Bertolo.