Si bien la dirigencia no lo puso explícitamente en esos términos, podía leerse claramente en las declaraciones de Rodolfo Di Pollina y Ricardo Carloni que la continuidad de Diego Cocca en el cargo de entrenador iba a depender mucho de cómo el DT tomara la nueva política futbolística canalla de mayor austeridad y más presencia de juveniles.
El presidente y el vice dijeron sucesivamente que la realidad económica de los clubes post pandemia de coronavirus va a ser dura y que se va camino a una merma considerable del gasto presupuestario para armar los planteles en todo el fútbol argentino, aún más si se confirma la supresión de los descensos hasta 2022.
Y Diego Cocca mandó la primera señal: dijo que está cómodo en el club y que pretende seguir. Por eso, en breve comenzarán las reuniones con Diego Bragarnik (su representante) para empezar a darle forma al nuevo contrato que le seguirá al que expira el 30 de junio.
“Estoy cómodo en Central. Estoy encariñado con los jugadores, con el club, veo un proyecto con juveniles a los que queremos darle más continuidad para que se puedan desarrollar; pienso en un plan de futuro y seguramente que nos tenemos que sentar a ver un montón de situaciones, pero la idea es la de continuar”, dijo Cocca en las últimas horas en la TV porteña.
Según estas declaraciones, el conductor canalla entiende la nueva realidad del club de Arroyito (idéntica a los demás clubes del país) y no ignora que los presupuestos deberán ser más acotados. Es más, se impondrá la presencia de jugadores del club incluso para capitalizar a la institución, algo a lo que el DT ya le ha dado el visto bueno.
