En Barcelona, hay motivos para volver a sonreír. Es que el astro rosarino Lionel Messi, capitán del equipo y principal figura, completó un nuevo entrenamiento sin problemas y, al igual que el miércoles, lo hizo con sus compañeros, situación que debería propiciar que mañana recibiese el alta médica definitiva.
El Barça anhela la reaparición de su líder tras una lesión muscular que lo dejó al margen de la derrota inicial de la Liga ante Athletic Bilbao y que, en principio, le permitiría aparecer entre los suplentes el domingo ante Betis.
Por su parte, la dirigencia sigue trabajando ya de forma apurada para convencer al París Saint Germain de Francia de un traspaso o un préstamo por al delantero brasileño Neymar.
Cada día que pasa parecen irse agotando los argumentos para recuperar a un Neymar que continúa bajo el amparo de su equipo pero que, aunque todo apunta a que desea abandonar el PSG, no ha manifestado públicamente qué destino desea emprender.
Mientras la administración del club catalán mantiene su pulso en un mercado de pases al que ya sólo le queda algo más de una semana, en el campo de entrenamiento Barcelona sigue trabajando para configurar un equipo lo más competitivo posible, después de que en la ofensiva el entrenador Ernesto Valverde haya perdido por lesión a Ousmane Dembéle y a Luis Suárez, a la espera de que Messi reciba el alta.
En la práctica de hoy tampoco participó el italo-brasileño Rafinha Alcántara, debido a una gastroenteritis, informó el FC Barcelona, según un despacho de la Agencia.
