“Si aparecen propuestas superadoras, el presidente está dispuesto a escuchar”. Con esa frase, el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, dejó abierta este jueves la puerta para una marcha atrás con la decisión del gobierno de intervenir Vicentín, luego de una reunión que mantuvo en Olivos con Alberto Fernández y miembros de la empresa en crisis.

La preocupación es el rescate; toda alternativa que permita a la Argentina seguir siendo un jugador clave –a través del rol de la compañía en el mundo agroexportador– es lo que interesa”, señaló Perotti a la prensa tras el encuentro.

Destacó la importancia de “haber generado un mecanismo de diálogo” para decidir el futuro de la firma y dijo que el mandatario nacional, tras los anuncios de esta semana de expropiar e intervenir, “lo que quiere es que la empresa crezca y su personal tenga tranquilidad, además de generar condiciones para que quienes son acreedores tengan una respuesta”.

Consultado sobre la posibilidad de impulsar cooperativas de trabajo, Perotti reconoció que “se mencionó el rol claro” que éstas suelen tener ante empresas en crisis y lo ve como “una posibilidad concreta” de salida. “No me cabe duda que sería una opción deseada por muchos de ellos”, dijo en relación a los empleados.

Adelantó que los representantes de Vicentín, que se oponen al DNU impulsado por el gobierno nacional para intervenir la compañía, se reunirán ahora con pares de YPF Agro, a cargo del fondo fiduciario del que pasarían a formar parte. Y también con Gabriel Delgado, designado por el Ejecutivo como interventor de la agroexportadora.

El mandatario santafesino sostuvo también que tanto la provincia como la Argentina "en general" son "jugadores internacionales de mucho peso en lo que es la elaboración de alimentos y transformación de materia prima".