La producción industrial en Santa Fe cayó un 2,1 por ciento en junio y finalizó el primer semestre de 2019 con un retroceso de 10,4%, en relación al mismo período del año pasado en ambos casos.

De acuerdo al Instituto de Investigaciones Económicas de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), junio fue el décimo tercer mes consecutivo con descenso de la actividad fabril, pese a que el nivel de comparación en el año pasado ya era bajo (junio de 2018 tuvo -9,3% interanual).

Una de las características que destaca el informe es la uniformidad de la crisis. Casi todos los sectores, menos los vinculados al agrocultivo y la soja, perdieron producción. El más afectado fue "Vehículos automotores" con un desplome de 48,2%.

El 85% de las ramas industriales con desarrollo en la provincia (51 sobre 60) mostraron en junio de 2019 menor nivel de actividad frente al mismo mes del año anterior.

Fisfe analizó las causas de la caída durante el primer semestre de 2019 y enumeró: el retroceso del consumo interno (las ventas en supermercados cayeron 13,5% en mayo); la inflación interanual de 55,8%; las altas tasas de interés (en junio a las Pymes les cobraron un promedió de 77%); una claro descenso en la inversión (las importaciones de bienes de capital disminuyeron en junio -24,1%); además de la pérdida del poder adquisitivo del salario entre otros puntos.

Por rubro, en junio de 2019 se reflejaron los siguientes resultados interanuales: vehículos automotores (-48,2%), carrocerías y remolques (-27,5%), maquinaria de uso especial (-25,6%), industria autopartista (-24,6%), muebles y colchones (-19,9%), maquinaria agropecuaria (-19,5%), fiambres y embutidos (-17,7%), siderurgia (-13,2%), productos de metal y servicios trabajo metales (-12,9%), prendas de vestir (-12%), entre otros.

Entre los sectores que lograron resultados positivos se destaca maquinaria de uso general, agroquímicos, y con especial gravitación la molienda de oleaginosas.